Organizaciones ambientales se hicieron eco de la denuncia sobre la situación de la reserva natural en el Bosque Atlántico del Alto Paraná en Paraguay. Sostienen que hay más de nueve reservas y propiedades que fueron invadidas por campesinos: Sur de Shindoi, Martines Yegros y Guyra Paraguay, Santa Inés Agroganadera Don Felipe, desmonte e invasión en propiedad de Hrisuk y ex Sudameris, total desmonte en propiedad de Pai Paredes y San Miguelito; invasión en Taguató, al límite de la reserva Reserva de Kaa’guy Pora, propiedad de Alianza, invasión en Toro Blanco, y nueva invasión en propiedad de Nueva Gambach.
Por Patricia Escobar
@argentinaforest
PARAGUAY (25/5/2021).- Este lunes, desde la reserva Nueva Gambach, Christine Hostettler, realizó un pedido desesperado a través de las redes sociales para detener la deforestación del Bosque Atlántico del Alto Paraná de Paraguay y reclama por la presencia de autoridades ambientales y de las fuerzas públicas para frenar los delitos ambientales ante la invasión de campesinos en tierras privadas. «Serían unas 200 familias las que quieren entrar», aseguró en contacto con ArgentinaForestal.com
https://www.argentinaforestal.com/2021/05/24/paraguay-desesperado-pedido-ante-la-invasion-de-tierras-privadas-de-la-reserva-parque-nacional-san-rafael-en-itapua/
Múltiples organizaciones ambientales se hicieron eco de la grave situación que se vive y se pronunciaron con una denuncia pública y ante las autoridades de Paraguay. «Necesitamos la intervención de las fuerzas del orden público y del Ministerio Público, así como el Ministerio del Ambiente ante la invasión de tierras y deforestación del Bosque Atlántico en la reserva San Rafael-Tekoha Guazú».
En el documento explicaron que en los últimos meses «se observó un aumento radical de las actividades ilícitas en el área de Reserva para Parque Nacional San Rafael, conocido también como el Tekoha Guasu del pueblo Mbya Guaraní que reclama su territorio ancestral. Es un tema muy preocupante dado que a la tala indiscriminada para hacer tablas, las fábricas de carbón, y los cultivos ilegales de marihuana, ahora se suman más de una docena de invasiones campesinas reclamando lo imposible: asignar tierras del área de Reserva para la Reforma Agraria”, manifestaron las ONG´s ambientales.
Se trata de nueve reservas y propiedades que fueron invadidas por campesinos: al Sur de Shindoi, propiedad de Martines Yegros y Guyra Paraguay, Santa Inés Agroganadera Don Felipe, gran desmonte e invasión en propiedad de Hrisuk y ex Sudameris; total desmonte en propiedad de Pai Paredes y San Miguelito; invasión en Taguató, al límite de la reserva Reserva de Kaa’guy Pora, propiedad de Alianza; invasión en Toro Blanco, y nueva invasión y deforestación en propiedad de Nueva Gambach.
“La asignación de tierras a la Reforma Agraria es un tema importantísimo, y serio, que requiere de una adecuada planificación. Si asignamos los últimos bosques nativos que quedan a esto, estamos yendo en dirección contraria y opuesta a lo que es el ansiado Desarrollo Sostenible. Debemos apuntar a todo lo contrario, asignar tierras habilitadas y disponibles para una reforma integral y verdadera, sin hipotecar y dejar sin bosques a nuestro país. El verdadero desarrollo sostenible se construye uniendo estos núcleos importantes de bosques, a través de sistemas agrosilvo pastoriles, y no al revés, destruyéndolos”, fundamentan en su reclamo por la intervención de las autoridades competentes.
El área de San Rafael/Tekoha Guasu es de importancia ambiental para la restauración de los bosques nativos. “Es el tekoha del pueblo ancestral Mbya guaraní quienes tienen derechos asumidos. Es un sitio de extraordinaria biodiversidad que en el último año sufrió el ataque despiadado de incendios provocados en más del 70% de su área. Sin embargo, a través de hechos y documentaciones se demostró su gran capacidad de regeneración, y su todavía importancia biológica y cultural. Es nuestro deber y obligación conservar y restaurar dicha área, pues ya son los últimos bosques del Bosque Atlántico del Alto Paraná en Paraguay, una zona de confluencia de importantes ecosistemas naturales”, remarcaron.
De esta forma, y atento a que este año donde se observan que estas invasiones campesinas se deben a promesas políticas que carecen de sustento, porque no conducirá a un desarrollo sino a más pobreza, llamaron a las autoridades a intervenir el área.
“No podemos tolerar más destrucción. Necesitamos la intervención de las fuerzas del orden público y del Ministerio Público, así como el Ministerio del Ambiente”, remarcaron en la misiva.
Asimismo, solicitaron que “el INFONA prohíba la extracción de madera y carbón en la zona. No se puede seguir avalando tanta injusticia y tantos hechos ilícitos que arriesgan la vida de nuestros guardaparques y activistas sociales indígenas y conservacionistas en un área de tanta importancia”.
El documento fue firmado por la Asociación para la Conservación de la Vida Silvestre (WCS), la Asociación Pro-Cordillera San Rafael en Paraguay (PROCOSARA); la Asociación de Ingenieros Ambientales de la UNA (AIAUNA); Alter Vida, CON Paraguay; Defensores Del Chaco – Pypore; Fundación Moisés Bertoni; Greentour; Guyra Paraguay; La Compostera SA; Organización Mundial de Conservación (WWF); Organización Paraguaya de Conservación Y Desarrollo Sustentable (OPADES); Paraguay Orgánico; Red Paraguaya de Conservación en Tierras Privadas; Sociedad de estudios Rurales y Cultura popular (SER), la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).