Un reciente informe de ONU-REDD subraya la necesidad de aumentar la ambición y acelerar la acción para proteger los bosques del mundo, cruciales para mitigar el cambio climático y salvaguardar el futuro del planeta. «Los planes nacionales, conocidos como Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC) son insuficientes. La forestación y restauración de áreas deforestadas necesitan muchos años para capturar el carbono perdido», remarcan.
Fuente: ONU- REDD
ALEMANIA (Bonn, 18 de junio de 2024) – Los planes nacionales de acción climática, conocidos como Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional (NDC), presentan objetivos forestales insuficientes, lo que resulta en un aumento continuo de la deforestación global, sostienen desde el Programa de Naciones Unidos para el Medio Ambiente.
“Esta fue una de las conclusiones clave del informe ONU-REDD (Programa de Naciones Unidas para la Reducción Evitada de Deforestación y Degradación) sobre «Aumentar la ambición, acelerar la acción: hacia una mejora de las contribuciones determinadas a nivel nacional para los bosques», publicado en junio durante la Conferencia de Bonn sobre el Cambio Climático.
A pesar de los compromisos globales para detener la deforestación para 2030, solo ocho de los 20 países con las tasas más altas de deforestación tropical han incluido objetivos cuantificados sobre los bosques en sus NDC.
«Después de que no se cumplió el objetivo de 2020 fijado por los líderes mundiales de reducir a la mitad la pérdida de bosques, debemos asegurarnos de que el objetivo de 2030 no corra la misma suerte», advirtió Dechen Tsering, director interino de la División de Clima del PNUMA.
El informe revela una brecha significativa en la protección, gestión y restauración de los bosques dentro de las NDC actuales, que describen planes para adaptarse y mitigar el cambio climático.
Analizado por expertos en clima del PNUMA, el informe muestra que los compromisos actuales de las NDC presentados entre 2017 y 2023 no cumplen con la ambición global de detener y revertir la deforestación para 2030.
Los bosques desempeñan un papel crucial en el logro del Acuerdo de París, ya que pueden contribuir con un tercio de las reducciones de emisiones necesarias para cerrar la brecha de mitigación para 2030.
Aunque 11 de las NDC incluyen objetivos cuantificados relacionados con la forestación y la reforestación, la mitigación efectiva del cambio climático requiere primero reducir la deforestación. La forestación y restauración de áreas deforestadas necesitan muchos años para capturar el carbono perdido.
Para armonizar aún más los esfuerzos nacionales, también es crucial que las NDC integren las estrategias nacionales existentes para reducir las emisiones derivadas de la deforestación y la degradación forestal, que 15 de los 20 países han adoptado.
Dado el papel de los bosques en la regulación de los ciclos hidrológicos, la amortiguación de las temperaturas extremas, la prevención de eventos climáticos extremos y la protección de la biodiversidad y la salud humana, la ambición de poner fin a la deforestación es esencial para que la humanidad evite enormes riesgos para las personas, el planeta y la vida que los sustenta.
Sin embargo, el reciente informe publicado muestra que las tasas de deforestación global continuaron aumentando, a pesar de una reciente disminución en Brasil.
Para Tsering, los planes de acción climática, previstos para 2025, deben tener objetivos ambiciosos, consistentes, detallados, específicos y viables para la conservación, restauración y uso sostenible de los bosques.
“Esto incluye aprovechar las políticas ambientales nacionales existentes y, al mismo tiempo, mejorar el apoyo a los pueblos indígenas y las comunidades locales, que son los administradores de primera línea de los bosques”.
El informe pide una colaboración internacional urgente para mejorar la ambición de las NDC. Mientras los países se preparan para la presentación de la próxima ronda de NDC para la COP30, conocida como NDC 3.0, con un plazo que se extiende hasta 2035, el informe insta a los países, especialmente aquellos con una extensa cubierta forestal, a incluir objetivos concretos y mensurables sobre los bosques en sus políticas revisadas. NDC.
Una mayor ambición en las NDC debe ir acompañada de una acción firme e inmediata. Para dar estos pasos será necesario un apoyo financiero predecible a escala para los países ricos en bosques.
Tsering enfatizó en la importancia de aprovechar las políticas ambientales nacionales existentes y mejorar el apoyo a los pueblos indígenas y las comunidades locales, quienes son los administradores de primera línea de los bosques.