Contra la tala indiscriminada |
«Nos pone contentos que finalmente se reglamente la Ley, aunque lamentamos que haya tenido que ser después de lo que pasó», dijo el ambientalista Hernán Giardini sobre la promesa de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner
Fuente: Diario Hoy.Net
BUENOS AIRES (14/2/2009).- El Secretario Gerneral de la Campaña de Bosques de la ONG ambientalista, Hernán Giardini manifestó que más allá de la firma de la presidenta y de la regulación, «será más importante la decisión política convincente, porque si no hay voluntad política sincera no servirá de nada la Ley por sí sola». «Es fundamental, de ahora en más, la aplicación en las provincias y para eso tienen que estar bien claros los criterios», continuó el activista en comunicación con diariohoy.net. Desde Greempeace creen que la decisión de Cristina Fernández, de firmar la reglamentación de la Ley de Bosques, está determinada por el desastre de Tartagal. «Está claro que esto que pasó marcó un cambio», dijo el responsable de la Campaña de Bosques, quien lamentó la demora en la medida. EL ambientalista también remarcó la importancia de los controles y de la regulación transparente. «Es fundamental que también se presupueste claramente para que se pueda controlar la deforestación clandestina». En la Argentina sólo queda el 30 % de bosque nativo, en los últimos años se talaron -en promedio- 250 mil hectáreas por año. En ese sentido, vale recordad que la Ley que limita la tala de vegetación fue aprobada por el Senado hace 14 meses y que el Ejecutivo nunca reglamentó. De hecho, desde que sucedió el anterior alud en Tartagal (en abril de 2006) se talaron más de 500 mil hectáreas en todo el país. Salta, Santiago del Estero y Chaco encabezan la lista de tierras arrasadas por empresarios de pooles agropecuarios, bajo la connivencia de los funcionarios de los diferentes gobiernos. Del mismo modo, los ambientalistas de diferentes organizaciones ambientalistas reclaman al gobierno nacional que retome le Ley de Glaciares, vetada por la propia Presidenta Fernández en beneficio de las grandes coorporaciones mineras y petroleras. «Que se se vuelva atrás el veto sobre la Ley de Glaciares sería una muestra de predisposición política» señaló Giardini. En materia ambiental, sería una forma de demostrar de que no se corre siempre detrás de las tragedias que son prevenibles.