Actualidad |
El Ministerio de Ecología donó madera que fuera incautada en transportes ilegales, a las localidades de San Antonio, Apóstoles y San Vicente, en respuesta a pedido de esos municipios para distintas necesidades. MISIONES(26/7/2004).- En la municipalidad de San Antonio se utilizará para construcción y reparación del edificio comunal y también a los fines de mitigar las demandas de familias carentes de recursos para reparars casas damnificadas, según consta en nota de pedido del material forestal.Mientras que en Apóstoles estará destinada para la construcción de colmenas de abejas destinadas a la distribución entre los asociados de la nueva Cooperativa Agropecuaria Zona Sur Ltda; como también para la construcción de puentes sobres caminos vecinales.En San Vicente, con la donación de la madera se destinará a la construcción de mesas y sillas para las escuelas del municipio.Otras donaciones que ya se realizaron para fines comunitarios, entre ellos la Subsecretarías de Acción Social del Ministerio de Bienestar Social de la Mujer y de la Juventud y para la construcción de panales de madera con destino a apicultura, proyecto que lleva adelante la Subsecretaría de Reconversión y diversificación del Ministerio del Agro y la Producción.También para la Comunidad Aborigen de Marangatú y a la Compañía de Cazadores de Monte 12 del Ejército, con asiento en San Javier.Las maderas donadas son de las siguientes especies Marmelero, Grapia, Incienso, Anchico, entre otras especies.Todas estas series de donaciones se vienen realizando a raíz de las intensas actividades de control en rutas realizadas por personal de puestos fijos de Ecología. De los procedimientos de control se incauta el producto forestal que provienen de apeos y extracciones de nativos de distintas especies que no cuenten con la documentación correspondiente.Este material decomisado el Ministerio de Ecología, realiza trámite administrativo pertinente y con el sumario administrativo autorizado dispone la entrega de la madera bajo acta de recepción, el cual es firmado por el receptor, quien deberá utilizar la madera para fines comunitarios.