| Piden la intervención del Estado para resolver la crisis económica que enfrente el sector |
Las principales cámaras madereras de la provincia piden al gobierno diálogo para atender las distintas problemáticas que enfrentan. Las empresas de Amayadap y Apicofom sostienen que la crisis del campo-gobierno argentino afectó la comercialización. Esto se suma al desabastecimiento de gasoil, discontinuidad en la cadena de pagos, caída de las exportaciones y pérdida de competitividad en la actividad, lo que generó una situación de “emergencia”. Advierten que peligran las fuentes de trabajo.
Por Patricia Escobar
MISIONES (19/6/2008).- Desde la Asociación de Madereros, Aserraderos y Afines del Alto Paraná (Amayadap) y la Asociación de Productores, Industriales y Comerciantes Forestales de Misiones y Norte de Corrientes (Apicofom) sostienen que la crisis del campo-gobierno argentino afectó la comercialización; sumado esto al desabastecimiento de gasoil, discontinuidad en la cadena de pagos, caída de las exportaciones y pérdida de competitividad en la actividad, sostienen que están en situación de “emergencia”. Directivos de la Amayadap emitieron ayer un documento dirigido a las autoridades del Estado nacional, provincial y municipal y comunicaron a la opinión pública en general que declararon al “sector de la foresto-industria de Misiones, al cual representan, en estado de emergencia”, tras realizar en la sede de la entidad eldoradense el pasado 17 de junio una reunión extraordinaria donde los empresarios evaluaron la situación actual en función a la crisis nacional por el conflicto Gobierno – Campo argentino. A su vez, el fin de semana también desde Apicofom salieron a advertir sobre la crítica situación económica que enfrenta el sector, agregando el déficit por la falta de materia prima y altos costos. De esta manera, el escenario de emergencia se plantea tanto desde las empresas de la zona Norte como en la Zona Sur de Misiones. Si bien la cámara empresaria del Alto Paraná ratificó su apoyo a los reclamos de los pequeños y medianos productores del campo, afirmaron que la protesta generó «graves trastornos» en el proceso productivo. En forma coincidente la Amayadap y Apicofom plantean que se ven afectados por: *Falta casi total del suministro de Gasoil: elemento vital para el proceso productivo del sector forestoindustrial, desde el abastecimiento de materia prima, el proceso de transformación y despacho del producto. *Discontinuidad y corte de la cadena de pagos: por los hechos de público conocimiento, con la aparición de los infaltables “cheque devueltos”. Esto ha generado en los últimos días recortes masivos por parte de los bancos de la cartera de créditos de nuestras Pymes y fenomenales subas de tasas de intereses. *Imposibilidad de llegar a destino: con los productos de la industria. «Debido a los cortes de rutas, hace más de dos meses que padecemos graves inconvenientes en llegar a los mercados, teniendo que asumir riegos incalculables y sobre costos». *Caída abruta de nuestras exportaciones, por la crisis de los mercados de EE.UU. y Europa en general. *Falta de competitividad: si a todo estos puntos mencionados le sumamos el “Alto costo Impositivo” que debe asumir una Pyme misionera, para competir con otras provincias que nos tienen las misma composición de costos tributarios; fundamentalmente como lo es el Impuesto Ingresos Brutos Provincial a las Exportaciones, «no es difícil pensar lo dificultoso que se vuelve en este contexto de crisis nacional mantener nuestra competitividad y los puestos de trabajo de nuestros empelados». De esta manera, las principales cámaras madereras de la provincia expusieron que existe “un estado general de crisis del sector”. Por su parte, Amayadap solicitó a la vez a las autoridades nacionales, provinciales y municipales que “hagan aportes de cordura al entendimiento, por medio del diálogo con el sector del campo, haciendo uso de los instrumentos democráticos a fin de superar esta situación de casi 100 días de conflicto”. Asimismo, los madereros del Alto Paraná advirtieron sobre su preocupación, ya que que “de no mediar una pronta solución a esta lamentable crisis nacional, muchas de las empresas asociadas a Amayadap deberán recurrir lamentablemente a drásticas medidas de reducción de personal mediante suspensiones y despidos masivos”.



