esde el sector privado consideran que el proyecto provoca inseguridad jurídica y atenta contra la inversión |
La iniciativa del diputado provincial renovador Ricardo Maciel intenta permitir la explotación agropecuaria por parte de terceros en tierras de la empresa. Será tratada el martes en la Comisión de Desarrollo Forestal y Agropecuario. El economista de la Fundación Mediterránea, Gerardo Alonso Schwarz, advirtió que el proyecto genera una señal negativa, ya que desalienta la llegada de futuras inversiones en la provincia. “El cambio de las reglas de juegos generan ruido en los inversores”, dijo.
Por Patricia Escobar
MISIONES (10/6/2010).- Mientras el diputado provincial renovador Ricardo Maciel revindicó el proyecto que consiste en debatir la búsqueda de una solución a la falta de tierras en Puerto Libertad y Colonia Delicia, el economista de la Fundación Mediterránea-IERAL, Gerardo Alonso Schwarz, sostiene que el proyecto genera un impacto negativo, ya que desalienta la llegada de futuras inversiones en la provincia. El próximo martes la comisión de Desarrollo Forestal y Agropecuario iniciará el debate para el tratamiento del proyecto de ley de «recuperación de tierras de Alto Paraná SA para la producción de alimentos», una iniciativa de Maciel -que también preside la mencionada comisión legislativa- que generó fuerte repercusiones en distintos sectores semanas antes de ingresar a la cámara de representantes. El diputado Maciel explicó en el programa Debate por el Futuro que la ley propuesta «pretende crear un espacio de discusión que considero aún pendiente en la provincia y que apunta a resolver el problema que enfrentan los municipios de Puerto Libertad, Wanda, Puerto Esperanza, Delicia y Victoria», dijo y agregó que «promueve generar un Plan Estratégico de Desarrollo en lo referente a la producción agropecuaria en las zonas mencionadas, como un instrumento de garantizar, en primera instancia, el autoabastecimiento y consumo para las familias; y después la actividad comercial». El legislador aseveró que hoy «no hay tierras disponibles» para la producción agropecuaria en las comunidades afectadas y por medio de la ley se «invita» a la empresa Alto Paraná a integrar un «Consejo de Cesión de Explotación de la Tierra», junto a la participación de representantes del Ministerio del Agro y Producción, Ecología, Inta, municipios intervinientes y asociaciones de productores y organizaciones intermedias de los municipios afectados. Sin embargo, en el articulo 1 del proyecto solicita expresamente: «Declárase de interés público provincial el uso agropecuario de las parcelas agrícola propiedad de Alto Paraná SA (Grupo Arauco) y/o quien lo suceda, asentadas en los municipios de Puerto Libertad, Wanda, Puerto Esperanza, Colonia Delicia y Colonia Victoria», lo que es considerado desde el sector privado como un atropello sobre Principios Constitucionales y del Derecho de Propiedad Privada, cuestionando la seguridad jurídica de Misiones, advirtiendo que son iniciativas que «alejan las inversiones». Desde la empresa Alto Paraná SA aún no emitieron opinión sobre el proyecto; pero sí expresaron su rechazo desde la Asociación Forestal Argentina (Afoa NEA) al tomar conocimiento público del proyecto, advirtiendo que «provoca inseguridad jurídica, incrementa la incertidumbre y atenta contra la inversión en la provincia». negrita/Señales desalentadoras/negrita Por su parte, también en el programa Debate por el Futuro, entrevistaron al Investigador Jefe de la IERAL-Fundación Mediterránea, Gerardo Alonso Schwarz, quien realizó un análisis socioeconómico y político de la iniciativa del diputado Maciel y explicó sus posibles impactos por distintos canales, evaluando tres puntos clave que se abren y que desalientan a futuras inversiones. “Primero, considero que Misiones debe definir hacia adelante si quiere atraer capital extranjero, sean empresas o personas físicas extranjeras que puedan tener o no tierras en la provincia. Esta discusión corre por una vía política, que implicaría también un cambio a futuro en la legislación de Misiones y sus consecuencias, lo que debe ser tenido en cuenta”, dijo. En segundo lugar, Schwarz, consideró que al tratarse de un proyecto que apunta a la “cesión de la explotación de la tierra” de una propiedad privada, “se están refiriendo a propiedades de una empresa que ya decidió invertir en Misiones en un proyecto foresto-industrial, por lo tanto, aún cuando apunten a crear un “Consejo” y aunque éste estuviera integrado incluso por la empresa, creemos que como señal de mercado es claramente negativa para la inversión extranjera”, dijo. “Siempre desde el Estado se expone de la necesidad de que lleguen nuevas industrias, tanto desde la Provincia como Nación, y se destaca la importancia que han tenido la radicación de las mismas en Misiones, como es el caso de la fábrica de zapatillas en Eldorado o las inversiones millonarias que llegaron a Iguazú. Pero con esta iniciativa se estaría evaluando una legislación que generará, sin dudas, algún ruido en las potenciales inversiones que aún no llegaron a Misiones, o en la toma de decisiones futuras de cualquier medida económica que pudiera existir. El impacto que genera estas señales para las expectativas de mercado no serán muy favorables”, advirtió. En este sentido, explicó que la “clave para el crecimiento de largo plazo es la estabilidad de las instituciones y las reglas de juego claras, el cambio de estas reglas de juego generan ruido sobre las posibles inversiones que se estén evaluando, en el caso que estén considerando, y que todavía no han llegado, en este caso, a Misiones”. Finalmente, sobre la iniciativa de Maciel, analizó un tercer factor que sostuvo tendrá un impacto con esta legislación. “Si bien en esta Comisión que crearían, se contempla la opinión de APSA; la realidad es que la mayoría de votos la tendrán los integrantes representantes del Estado a nivel local y provincial; y mas allá de esto, llama la atención como señal de mercado que se haga hincapié en una sola empresa, porque podremos discutir si, en adelante, la propiedad de la tierra pueda estar o no en manos de extranjeros o empresarios, o cual sería el uso que pudieran darle en la zona norte a esta tierra por medio del Ordenamiento Territorial y definir que tipo de destino productivo y explotaciones puede haber; pero llegar al punto de detalle donde se mencione específicamente o se legisle analizando a una sola empresa en el proyecto, llama mucho la atención y genera aún mayores ruidos a estas señales que mencionamos anteriormente que se están enviando a los mercados desde Misiones. Esto es importante de tener en cuenta, porque si una nueva empresa extranjera quiere venir a invertir a Misiones generando trabajo de 500 a 2000 empleados con una potencial nueva fábrica , ahora tendrá que pensar si realmente existe la posibilidad cierta de que en el futuro no le suceda lo mismo. Concretamente, se desalienta las inversiones”, concluyó. negrita/Cesión por consenso/negrita Por su parte, el diputado Maciel aclaró en la entrevista que con el proyecto apunta al diálogo con la empresa y por medio del Consejo para la “cesión de explotación de las tierras”, no busca la expropiación, según explicó. “A diferencia de otras situaciones de ocupación en tierras privadas y fiscales, en este caso no es un problema de que la gente no tiene donde vivir, sino que no tiene donde producir y trabajar la tierra. Esas familias fueron alguna vez agricultores, y la empresa fue avanzando sobre la adquisición de tierras, sea cual fuere las razones políticas y económicas de la historia del país que se lo permitió. Hoy esta gente pasó de prestar servicios forestales a la empresa, a ser otra vez desplazada en mano de obra por la mecanización y tecnificación de Alto Paraná. Por lo tanto, la salida de estas familias es emigrar hacia las zonas urbanas de Iguazú o Eldorado. Esto es un problema social y se presenta por la falta de la tierra para desarrollar una actividad económica, rural. Con este proyecto, pretendemos que este proceso de cambio necesario se de con el diálogo y el consenso de la empresa, buscando una manera de uso compartido de la tierra, que nos pueda permitir, por medio de la tutela del mismo Estado provincial, el desarrollo de algunas actividades agropecuarias consociadas con la forestación de la empresa en los municipios donde se desempeña”, insistió el legislador. Por otra parte, consideró que con su proyecto “no se esta avasallando derechos adquiridos, ni afecta la seguridad jurídica. El alcance del Consejo de Cesión de Explotación de Tierra analizará los aspectos jurídicos que preserven al dueño de la tierra, por las eventualidades que puedan surgir, y en este marco, todo lo que se defina esta supeditado a un acuerdo y dialogo con la empresa. Las instituciones que participen de este consejo propuesto definirán las pautas del uso compartido de las tierras y deslindarán las respectivas responsabilidades”, aclaró. “También las hectáreas que serán afectadas y los productores que serán beneficiados”, agregó el diputado. De esta manera, insistió en que será “el Consejo local el responsable de definir el Plan Estratégico según la realidad de cada una de las comunidades afectadas, y en forma consensuada con la empresa. No hablamos de expropiación en esta instancia, pero el alcance de esta ley estará supeditado a lo que se defina en el debate en la legislatura, no podemos aseverar qué puede ocurrir en una siguiente instancia, pero a partir del trabajo estratégico esperamos que se abra el debate del proyecto y se determinará si es necesario avanzar más allá de lo propuesto en esta iniciativa”, advirtió. Con respecto a las críticas sobre una iniciativa “pensada a medida” de una sola empresa con grandes extensiones de tierras en la provincia, dijo que “espero que en un futuro el Consejo de Cesión identifique otras empresas en el Norte para avanzar con esta ley”. “Pero por ahora, apuntamos a que Alto Paraná intervenga y participe de las decisiones del Consejo, pero con absoluta apertura de diálogo; y ceda en esta instancia a compartir la explotación de la tierra con la gente de la zona, o aporte a una solución de esta problemática que se plantea”, subrayó. Finalmente, el legislador adelantó que la iniciativa presentada ya tiene el consenso general de sus pares para debatir el proyecto. “Todos los legisladores evalúan la posibilidad de discutir y abrir el debate”. “El poder discutir este tema en el parlamento es sano y valedero, no es un tema que se resolverá de un día a otro, es un tema sensible y complejo, pero hay que avanzar en la discusión y el diálogo para atender esta problemática”.