El organismo impulsa desde el INTA Montecarlo un programa integral para la conservación y recuperación del Pino Paraná (Araucaria angustifolia), una especie emblemática del Bosque Atlántico que hoy se encuentra en peligro crítico debido al descenso en la producción de polen y semillas, fenómeno asociado al aumento de inviernos más cálidos y húmedos.
Fuente: INTA Misiones
MISIONES (9/12/2025).- En el Campo Anexo Manuel Belgrano (CAMB), el INTA impulsa un programa integral para la conservación y recuperación del Pino Paraná (Araucaria angustifolia), una especie emblemática del Bosque Atlántico que hoy se encuentra en peligro crítico debido al descenso en la producción de polen y semillas, fenómeno asociado al aumento de inviernos más cálidos y húmedos.
La Araucaria, capaz de superar los 30 metros de altura y alimentadora natural de numerosas especies de fauna, es un símbolo biológico y cultural de la selva paranaense. Su regresión poblacional encendió las alarmas científicas y dio origen a un trabajo sistemático dentro del INTA Regional Misiones para revertir la tendencia.
En San Antonio, el organismo desarrolla relevamientos de ejemplares remanentes, selección de árboles madre, monitoreos fenológicos y estudios aerobiológicos para comprender su dinámica reproductiva bajo las condiciones climáticas actuales.
Según la directora del INTA Montecarlo, Dra. María Elena Gauchat, las poblaciones argentinas poseen “variabilidad genética moderada a baja, lo que las vuelve vulnerables, pero también valiosas por su adaptación al ambiente subtropical”.
El plan contempla además la conservación genética para garantizar disponibilidad de germoplasma de calidad.
A partir de rodales históricos y nuevas plantaciones, se obtienen semillas, se producen plantines y se avanza en la restauración de áreas degradadas. “La diversidad genética es nuestra mejor herramienta frente a escenarios cambiantes”, agrega Gauchat.
La estrategia se complementa con técnicas de manejo forestal sostenible —raleos selectivos, apertura del dosel y reducción de competencia— para favorecer la regeneración natural. Parte de los rodales implantados cumple un rol productivo, pero al mismo tiempo conserva diversidad y aporta material para reforestar.
Mientras el Pino Paraná enfrenta amenazas crecientes, el trabajo científico y la planificación responsable permiten imaginar un futuro posible para esta especie que forma parte del patrimonio ambiental de Misiones y de la identidad del Bosque Atlántico.
