Últimas noticias

Opinión

UNESCO alerta sobre la falta de cooperación internacional en la gestión de aguas transfronterizas

“Los países que no gestionan conjuntamente sus recursos hídricos compartidos afrontarán mayores retos para mitigar el impacto de inundaciones y sequías”, advierte un reciente informe elaborado por la UNESCO y UNECE. En el documento analizan estratégicas y recomendaciones que muestran los beneficios y principales desafíos de la cooperación hídrica transfronteriza.

 

Fuente: UNESCO 

 

ESPAÑA (Octubre de 2024).- La UNESCO y la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa (CEPE) publicaron un informe que advierte sobre la insuficiencia de colaboración internacional en la gestión de ríos, lagos y acuíferos compartidos. Según este documento, la falta de cooperación disminuye la capacidad de los países para enfrentar inundaciones y sequías, problemas cada vez más frecuentes debido al cambio climático.

En este sentido, la UNESCO insta a las naciones a reforzar sus esfuerzos para implementar estrategias conjuntas. En el informe se detalla que actualmente 153 países, incluyendo la región de las tres fronteras entre Argentina, Brasil y Paraguay, dependen de aguas transfronterizas.

Sin embargo, solo el 28% de estos países tiene acuerdos efectivos para gestionar estos recursos vitales de manera colaborativa. La directora general de la UNESCO, Audrey Azoulay, manifestó que «los países solo lograrán realizar una gestión eficaz de las aguas compartidas y mitigar los efectos de las inundaciones y sequías, si colaboran con los países vecinos».

Azoulay enfatizó la necesidad de incrementar los esfuerzos para asegurar una gestión sostenible de estos recursos esenciales.

El informe también subraya que, de continuar la tendencia actual, solo un tercio de los países logrará implementar una gestión conjunta eficiente para el año 2030. A pesar de los avances logrados desde 2017, el ritmo de progreso sigue siendo lento, lo que podría retrasar las estrategias necesarias para abordar los efectos del cambio climático.

En palabras de Azoulay, «su escasez, cada vez más acentuada, genera unos efectos negativos considerables en nuestras sociedades».

En conclusión, el informe de la UNESCO y la CEPE destaca la urgencia de fortalecer la cooperación internacional para gestionar adecuadamente las aguas transfronterizas y enfrentar los desafíos ambientales actuales y futuros.

Por su parte, Tatiana Molcean, secretaria ejecutiva de CEPE, indicó que el impulso creciente de la cooperación transfronteriza en materia de agua demuestra un avance en buena dirección, “pero todavía debemos aumentar nuestros esfuerzos para lograr una gestión del agua conjunta ante el agravamiento de la crisis climática a la que se enfrentan los países en todo el mundo. Se han establecido más de 100 acuerdos de cooperación transfronteriza desde la entrada en fuerza del Convenio del Agua de las Naciones Unidas en 1996, gestionada por CEPE. Por ello, animo a todos los Gobiernos a que se unan a la comunidad mundial de partes implicadas en este tratado, una comunidad que se está expandiendo con gran rapidez”, expresó.

El informe destaca que el nivel de cooperación es mayor en lo que respecta a ríos y cuencas lacustres, en comparación con los acuíferos. Hasta el 41 % de los países que comparten ríos y lagos transfronterizos tienen acuerdos operativos de gestión para la mayor parte de estas aguas, en comparación con apenas un 25 % en el caso de los acuíferos transfronterizos compartidos.

Los niveles más altos de cooperación se encuentran en África Subsahariana, Europa y América del Norte. El informe señala que ha se realizado una mejora en la cooperación sobre aguas transfronterizas, ya que en 2017 solo 23 países (un 15 %) gestionaban la mayor parte de la superficie de cuencas transfronterizas, frene a 43 países (el 28 %) en 2023.

Europa, América del Norte y África Subsahariana presentan el mayor nivel de cooperación: 39 de 84 países (el 46 %) de estas regiones tienen la mayor parte de la superficie de cuencas transfronterizas cubierta por acuerdos operativos.

En África Subsahariana, el número de países con un nivel muy alto de cooperación aumentó cinco veces, pasando de 3 en 2017 a 16 en 2023. África Subsahariana cuenta con una larga tradición de cooperación transfronteriza por medio de organizaciones de cuencas.

Varios proyectos recientes en esta región han permitido establecer sistemas de cooperación sostenibles que implican a las autoridades locales, científicos y comunidades indígenas.

Uno de estos proyectos tiene lugar en el lago Chad, donde el apoyo de la UNESCO ha permitido restaurar ecosistemas degradados y establecer sistemas de alerta temprana para detectar y vigilar el deterioro de la calidad del agua y la aparición de sequías.

Este sistema, gestionado de forma colectiva por 8 países, beneficia en la actualidad a millones de personas, en parte gracias a la producción sostenible de espirulina, una planta acuática rica en proteínas. Chad, Camerún y Nigeria, que rodean el lago Chad, se han adherido al Convenio del Agua de las Naciones Unidas para apoyar una gestión conjunta de la cuenca.

Cooperación para mitigar el impacto climático

El cambio climático supone una gran amenaza para las zonas más vulnerables, debido a las repercusiones que genera, como la disminución de la disponibilidad y el acceso al agua potable, así como el mayor riesgo de enfermedades transmitidas por el agua.

El informe de la UNESCO y CEPE demuestra que, aunque los países han trabajado considerablemente para afrontar el cambio climático y reducir el riesgo de desastres a nivel de las aguas superficiales, es necesario seguir incrementando estos esfuerzos y el nivel de cooperación.

Casi dos tercios de los ríos y cuencas lacustres transfronterizos incluyen la adaptación climática dentro de sus taras como órganos de gestión conjunta.

Sin embargo, en la actualidad, tan solo el 14 % logró adoptar una estrategia concreta para afrontar este desafío, y solo el 20 % avanzó en una estrategia conjunta para reducir el riesgo de desastres.

El informe también señala que la cooperación en materia de reducción de inundaciones se encuentra en un estado más avanzado que la de la reducción de los efectos por sequía. Eso se debe, en parte, a la larga tradición de cooperación transfronteriza en materia de inundaciones.

En la actualidad, el 50 % de los ríos y cuencas lacustres que presentan arreglos operativos, cuenta con sistemas coordinados de alarma ante inundaciones, frente a un 30 % en el caso de sequías.

 

Artículos relacionados