Un proyecto financiado por Unitán SAICA |
De esta manera, la provincia se convirtió en la primera, de las ocho que integran el Gran Chaco Americano, en obtener la certificación FSC (Forest Stewardship Council ), otorgada al manejo sustentable de bosques nativos. FORMOSA (6/9/2010).- El sello distinguió al establecimiento Santa Rosa, propiedad del ingeniero Gustavo Rhinner, tras un proyecto financiado por Unitán SAICA que estuvo a cargo de dos ingenieros forestales formoseños: Walter Degano y Marcelo Zerbatto. El coordinador en Argentina de FSC, Emiliano Escurra, explicó que contar con esta certificación abre mercados en el mundo, donde hay una importante necesidad de madera certificada. A modo de ejemplo, contó que en Sáenz Peña, Chaco, se realizó un taller con productores de carbón, donde se expuso que la demanda internacional exige que se sea de materia prima certificada, como la que obtuvo el bosque formoseño. “Ellos no pueden cumplir esto y se están perdiendo ventas”, señaló, lo que ejemplifica la importancia de contar con este sello. Sin embargo, lo que resaltó como más positivo es que se sienta un precedente en la provincia y la región. “Lo más importante es que se fijó un caso, porque convencer a un propietario o un productor de cambiar su forma de trabajar -para lograr estándares de sustentabilidad- es muy difícil, pero a partir de un caso ya es más fácil. Ya no es un porteño o un gringo de afuera que les viene a decir algo, sino un mismo productor de la zona, un vecino”, dijo. Escurra contó que para obtener la certificación FSC se debe tener una pauta de conducta “bastante estricta” en cuanto a conservación y sustentabilidad en el área boscosa que se pone a consideración. “Hay que manejar bien el bosque, hay que tratar bien a la gente -no hay que tener trabajadores en negro ni con falencias en seguridad- y los trabajos deben hacerse con un plan muy cuidado”, señaló. Finalmente, dijo que Unitán tomó la iniciativa con la clara consigna de que siga habiendo bosques, su materia prima para la elaboración del tanino, pero que también es importante para la industria maderera de la provincia. “La decisión de Unitán fue muy inteligente e innovadora, porque no hay ningún caso en toda la Argentina de una empresa que ayude a un pequeño o mediano productor a certificar”, remarcó. Por eso consideró que el Gobierno provincial “se puede anotar porotos”, acompañando proyectos de certificación para que puedan conseguirla más hectáreas de bosque formoseño. “Ustedes tienen una provincia muy interesante, y me parece un momento muy oportuno para que le presten mucha atención a la industria del bosque nativo, sobre todo en cuestiones muy básicas: plantación y restauración”, concluyó. Fuente: La Mañana