Ecología implementará este año más controles para frenar los desmontes |
Según una estadística de la Secretaría de Ambiente de la Nación, en Misiones se registró durante 2002-2006 conversión por más de 62 mil hectáreas. Desde el Ministerio de Ecología confirmaron que “aprobadas fueron unas 50 mil hectáreas. Esto indica que durante 4 años se realizaron rozados sin autorización de la autoridad de aplicación por unas 13 mil has. y este es el desafío a corregir desde el organismo”, aseveró el director general de Bosques de la provincia, Rubén Baumgratz.
Por Patricia Escobar
MISIONES (28/1/2009) .- En el período 2002-2006 se registraron un total de 62 mil hectáreas de conversión de bosques nativos en la provincia, según develó un relevamiento de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación que fue proporcionado al organismo provincial. Pero solamente se aprobaron planes por unas 50 mil hectáreas, lo que indica que aproximadamente 13 mil has fueron afectadas por rozados que se realizaron sin autorización del Ministerio de Ecología, Recursos Naturales Renovables y Turismo de Misiones. El dato lo confirmó el director general de Bosques de la Provincia, Rubén Baumgratz, durante la entrevista con ArgentinaForestal.com, oportunidad en la que analizó los daños ambientales que se están produciendo por el avance de la intrusión sobre grandes propiedades privadas con grandes extensiones con Bosques Nativos en Bernardo de Irigoyen, entre otros municipios que enfrentan este problema. “Desde la Secretaria de Ambiente de la Nación nos llegó recientemente esta estadística, que marca que en Misiones perdió en el período de 1998-2002 unas 67.200 hectáreas de bosques nativos. En tanto, desde el 2002 al 2006 la conversión fue por unas 62 mil hectáreas; pero en este último período, desde el Ministerio de Ecología se autorizaron alrededor de 50 mil hectáreas, lo que significa que en 4 años se realizaron por alrededor de 13 mil has de conversión o rozado sin autorización de la autoridad de la aplicación, que en ese caso sería de la Dirección General de Bosques. Esto es lo que tenemos que corregir”, aseveró Baumgratz. Recorriendo la zona de Bernardo de Irigoyen y San Pedro se puede observar la destrucción de los bosques nativos que se producen en tierras privadas intrusadas, ya que los ocupantes realizan quemas y rozados para adquirir madera y posteriormente realizar cultivos de maíz para alimentar cerdos. Desde hace tiempo que los propietarios están denunciando por este medio los graves daños ambientales y económicos que enfrentan por el acelerado avance de intrusión. Se trata de grandes propiedades que están bajo Ley Prov. 4093 de Expropiación, Arraigo y Colonización, como ser la empresa Puente Alto SA o Colonizadora Misionera, Distribuidora Eldorado; pero también hay preocupación de propietarios que no están bajo este régimen, pero tienen ocupantes ilegales, como es el caso de las 10 mil hectáreas de la compañía maderera ICFISA de Víctor Dovigo. negrita/Frenar el desmonte/negrita «En un recorrido a campo se puede observar que hay una amplia superficie en la provincia donde se realiza, en forma no autorizada, rozados sin respetar legislaciones vigentes, como los bosques protectores en pendiente de más de 20%, como así en los cursos de agua, etcétera. Esto pone en riesgo el recurso hídrico, ya que de ser permanente el daño, el agua tiende a desaparecer», explicó el funcionario. «Pero además, la destrucción de los bosques nativos, si se realiza en forma indiscriminada pone en riesgo todo el ecosistema», agregó. Por otra parte, reflexionó que «ante la legislación nacional, que prohíbe la conversión o rozado (la Ley Nº 26.331 de Presupuestos Mínimos de los Bosques nativos) la sociedad debe tomar conciencia del rol que cumplen los bosques y su función socioambiental, para cuando llegue la hora de cuantificar el valor que tiene para la comunidad local, regional, e incluso para la humanidad», dijo. Por la ubicación estratégica de Misiones, cuenta con los únicos reservorios de la selva subtropical o selva paranaense, el funcionario destacó que «contamos con un pequeño pulmón que tiene un alto valor ambiental, pero cuantificar esto tiene un valor incalculable», manifestó negrita/Valor ambiental/negrita Para Baumgratz, “hay que reflexionar y atender la protección de los bosques nativos, dado que tienen un valor ambiental para las futuras generaciones, además de su importancia desde el punto de vista turístico. Este valor es muy superior a lo que se pretende lograr con la explotación directa de los productos maderables. Por ello, el desafío en adelante es corregir el avance de la conversión sin autorización desde el organismo”, recalcó. “Por otra parte, también se debe remarcar que a partir de la Ley de Bosques –que establecerá el Ordenamiento Territorial en las provincias-, la Nación nos autoriza a dar un manejo sobre una rentabilidad sostenible a través del tiempo por medio de programas que ejecutarán como consecuencia del ordenamiento, con incentivos que se podrán acceder a través de programas de asistencia financiera. Esto permitirá que aquél propietario que quiera mantener el bosque en pie por el rol que cumple, pueda hacerlo”, manifestó el funcionario. Sin embargo, en la actualidad esta oportunidad para empresarios forestales misioneros está en riesgo, considerando el complejo escenario que enfrentan los propietarios que están amenazados en forma permanente por el robo de madera y quemas de bosques de parte de intrusos, realizando denuncias permanentes para frenar este conflicto sin obtener respuestas. El director de Bosques aclaró que “para conseguir estos incentivos se deberá ser muy cuidadoso. El gobernador Maurice Closs trasmitió al ministro de Ecologia (Horacio Blodek) que Misiones tiene que mantener como mínimo su superficie de Bosque Nativo, que hoy están en alrededor de 800 mil hectáreas y significan alrededor del 27% de la superficie total de la provincia. La tendencia es lograr incrementar el área por medio de la ley de Ordenamiento Territorial, restaurar parte de los bosques que se perdieron, recuperar los bosques protectores de las cuencas hídricas, cuidar los cursos de agua, ya que para mantener bosques nativos y proteger fauna itícola, hay que garantizar la calidad de agua, todo el ecosistema depende de los bosques nativos”, concluyó.