El Poder Ejecutivo nacional tiene por objetivo prorrogar la Ley 25.080 por otros diez años |
La Secretaría de Agricultura de la Nación aplicará la medida a partir de los planes de la Campaña 2006. De esta manera, se modifica la modalidad del aporte no reintegrable que, hasta el momento, se pagaba según valores históricos. Así lo anunció el director de Forestación de la Sagpya, Omar Tesolín.
MISIONES Y ENTRE RIOS (27/10/2006).- A partir de la campaña 2006, el monto del incentivo forestal, comprendido en la Ley 25.080 de Inversiones para Bosques Cultivados, se actualizará de acuerdo a los costos del momento de pago, según anunció el director de Forestación de la Secretaría de Agricultura de la Nación, Omar Tesolín, en la entrevista con ArgentinaForestal.com, en el marco de las jornadas forestales de Entre Ríos realizadas el jueves pasado en el Inta Concordia. De esta manera, los productores que presentaron planes a partir de este año percibirán el aporte no reintegrable según los costos de plantación registrados a la fecha de cobrar el incentivo, es decir que el plantador que hizo una presentación en 2006 por una determinada cantidad de hectáreas, recibiría el subsidio en 2008 de acuerdo a los valores de plantación que se actualicen ese año. Con esta nueva modalidad quedaría abolido el sistema de “costo histórico”, por el que el productor cobraba el ANR según los costos del periodo en que presentó el plan, con esto, por ejemplo, los forestadores que plantaron en 2002 y 2003, y recién percibieron el incentivo este año, lo hicieron al precio existente hace tres o cuatro años atrás, con lo cual recibían un beneficio devaluado. Si bien, Tesolín explicó que esta modificación no tendrá un efecto “retroactivo” (no abarcará planes anteriores a 2006), la medida adoptada por la Sagpya da respuesta a un antiguo y reiterado reclamo de los productores forestales, quienes veían como con los atrasos en los pagos del incentivo por parte de la Nación, más la devaluación de la moneda y la inflación que se incrementa en forma sostenida todos los años, al momento de recibir el beneficio ya no alcanzaba para cubrir la inversión realizada, con lo cual comenzaron a disminuir las hectáreas solicitadas para reforestaciones o nuevas plantaciones, excepto las grandes empresas que requieren mantener el nivel de implantación para poder abastecerse. negrita/Extienden plazo/negrita Esta situación tuvo una fuerte repercusión justamente en la presente campaña forestal, así lo admitió Tesolín al señalar que “la cantidad de planes presentados fue muy baja, y también la cantidad de hectáreas solicitadas, por lo que decidimos extender el plazo para la presentación de carpetas hasta el 31 de marzo del año próximo”. En cuanto a las deudas que sigue arrastrando la Nación para con los productores, el funcionario explicó que “estamos haciendo todo lo posible para liquidar todos los planes correspondientes a 2002 y 2003, pero parte de los atrasos para regularizar la situación tiene que ver con que los colegas del sector privado no presentan las carpetas con toda la información correspondiente, algunos ni siquiera con la documentación básica”. Por otra parte, al referirse a los beneficios fiscales (estabilidad fiscal y reintegro del IVA, también contemplados en la Ley 25.080), señaló que “a partir de la auditoria comenzada en 2004 se suspendieron muchos beneficios, en especial los otorgados a grandes empresas, pero luego de trabajar en forma coordinada con Aduana, la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), y legales de la Sagpya, ya estamos en condiciones de resolver los expedientes”. En ese sentido, si bien Tesolín no se atrevió a fijar un plazo para la normalización de las solicitudes de beneficios fiscales, indicó que están “haciendo todo lo posible” para tratar de lograrlo hacia fin de año. subtitulo/Prórroga de la 25.080/subtitulo Con respecto a la vigencia de la Ley 25.080 de Inversiones para Bosques Cultivados, que rige hasta 2009, el Director de Forestación de la Secretaría de Agricultura de la Nación, Omar Tesolín, explicó que el objetivo del Poder Ejecutivo nacional es de prorrogar la norma tal como está por otros diez años. Esta posición no es bien vista por la Asociación Forestal Argentina (Afoa), cuyo presidente, Manuel Climent, señaló que “antes de pensar en extender la ley deberían preocuparse por hacerla cumplir durante estos dos años que aún le quedan de vigencia”. De todas maneras, el titular de Afoa sostuvo que la postura de la entidad es “no prorrogar la actual norma, sino dividirla en dos proyectos diferentes, de manera tal que el Congreso promulgue dos leyes, una que comprenda el incentivo forestal (subsidio a las plantaciones) y otra que rija sobre la promoción industrial (beneficios fiscales)”, visión que tiene posiciones encontradas dentro de los distintos segmentos que representan al sector forestal. Por otra parte, Climent volvió a insistir en la necesidad de que el gobierno fije una política de Estado para la actividad foresto-industrial, “el productor planta hoy lo que la industria va a consumir en diez, 15 o 20 años, es decir que es vital para nuestro sector poder planificar, y para eso necesitamos políticas de largo plazo, y no decisiones que duren cuatro años, es decir, lo que dura un presidente o un funcionario”. “Una clara muestra de esta situación –continuó Climent-, es la falta de cumplimiento en tiempo y forma con el pago del incentivo forestal, por lo que a diferencia de Chile, Brasil y Uruguay, en Argentina nunca crecemos en superficie implantada, sino que apenas logramos reforestar lo que cosechamos, lo cual va a significar un fuerte bache para la industria a futuro”, e insistió una vez más que “en forestal lo que no se hace hoy repercute a futuro y es irremediable, tal como lo vive actualmente Misiones, ante la falta de materia prima”.