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Vuelve a crecer la Inversión Extranjera Directa en Argentina

Economía

Luego de cuatro años consecutivos de caída en la inversión extranjera directa (IED1), se observa una fuerte recuperación durante el 2004.

Fuente: Agencia de Desarrollo de Inversiones (Argentina)

A comienzos de 2004 la UNCTAD (United Nations Conference on Trade and Development) preveía, luego del retroceso que se había producido en los 3 años precedentes, una recuperación de las corrientes mundiales de IED. Para América Latina, que había sido la región más negativamente afectada del mundo en desarrollo, si bien las perspectivas eran favorables, dependían del comportamiento de la economía en Argentina y Brasil. Sin que todavía estén disponibles los últimos datos correspondientes al pasado año, en virtud de lo ocurrido en los tres primeros trimestres, ya se puede afirmar que la IED en Argentina tuvo un espectacular desempeño a lo largo del 2004. La creciente confianza de los inversores, el mejoramiento de la economía mundial y de Argentina en particular que por segundo año consecutivo lidera el crecimiento en la región, influyeron positivamente para que creciesen los flujos de IED hacia Argentina. Las estadísticas de la Dirección de Cuentas Internacionales del Ministerio de Economía muestran que los flujos acumulados al tercer trimestre de 2004 alcanzaron los US$3.231 millones, superando ampliamente lo captado durante todo el 2003 (US$1.357 millones). Esto significa que si la IED en Argentina alcanza en el 2004 los US$4.000 millones, habrá experimentado un crecimiento de casi 200% respecto a 2003. Una de las principales características de este nuevo proceso inversor se encuentra en el cambio de patrón sectorial observado en los flujos de IED. Mientras que hasta el 2001 los sectores no transables tuvieron un papel dominante, son ahora los sectores productores de bienes los que lideran la absorción de la corriente de fondos provenientes del exterior. Las mayores inversiones se explican por un contexto internacional favorable y por la presencia de oportunidades de negocios disponibles. En cuanto a la evolución de los distintos componentes que conforman el financiamiento externo de la economía argentina bajo la forma de IED, es también posible realizar algunos comentarios respecto a su evolución reciente. Las transferencias accionarias, que fueron el componente más importante de los flujos de IED durante los ‘90, tienen una participación marginal durante el 2004, aunque revierte el signo negativo observado en los 2 años anteriores. Por otro lado, los aportes de capital, aparecen como el principal componente de la IED. Estos fondos pueden estar vinculados al incremento de la capacidad instalada o al sostenimiento de la estructura patrimonial de la subsidiaria. Durante el período 2001-03 este componente alcanzó niveles récord pero vinculado con aportes destinados a afrontar pérdidas recurrentes o capitalizar deudas, en el 2004 si bien continúa siendo el principal componente de la IED muestra valores similares a los del promedio de los ’90. Otra de las novedades ha sido la evolución del financiamiento a las empresas de Inversión Directa por medio de préstamos realizados por la matriz o por compañías vinculadas al grupo. Mientras que en 2002 y 2003, como consecuencia de la cancelación o capitalización de deudas, esta fuente presentó valores negativos (salida de capitales) en el 2004 vuelve a mostrar un signo positivo convirtiéndose así en el segundo componente de la IED. La continua recuperación de la economía argentina observada desde fines de 2002, y las altas tasas de rentabilidad en diferentes actividades transables, son condiciones que por si solas permiten augurar un futuro promisorio en matera de inversión extranjera. Sin embargo, es también importante la presencia de otros factores que permitirán no solo afianzar ese proceso sino que serán determinantes para explicar una mayor preponderancia de Argentina como destino de la IED en la región. Estos factores tienen que ver con la recuperación de la estabilidad política y económica y la puesta en marcha de medidas tendientes a resolver los principales desafíos que presenta Argentina en el frente externo. La concurrencia de ambas condiciones posibilitará un regreso sostenido de la IED al país en el marco de un creciente incremento de la confianza de los inversores extranjeros más allá de las oportunidades puntuales de inversión. En definitiva se trata ni más ni menos que de alentar la inversión extranjera directa, afianzando la estabilidad política y social, y la previsibilidad económica, que son los verdaderos pilares de la seguridad jurídica. De ello y de la presencia de negocios atractivos dependerá el regreso de mayores flujos de IED. cursiva/IED: La IED es un concepto de Balanza de Pagos, como tal no significa inversión en sentido económico sino modalidades de financiamiento que sólo en algunos casos están destinadas a la formación de capital por parte de filiales de compañías extranjeras. En particular, la IED está compuesta por aportes de capital realizados por la casa matriz a su filial, reinversión de utilidades obtenidas por la filial y créditos intrafirma. La IED registra con precisión los movimientos de divisas que se realizan entre residentes y no residentes bajo esta forma./cursiva

Fuente: Agencia de Desarrollo de Inversiones (Argentina)

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