Disputa por construcción de plantas de celulosa: |
Rodolfo Nin Novoa, vicepresidente de Uruguay, instó ayer al gobierno de Argentina a que tome acciones contra los ambientalistas que reanudaron sus protestas por la construcción de dos plantas de celulosas en la costa del río Uruguay.
Fuente: Lignum
URUGUAY (29/6/2006).- El vicepresidente uruguayo asegura que su país no está dispuesto a aceptar que siga bloqueo que afecta su economía. Rodolfo Nin Novoa, vicepresidente de Uruguay, instó ayer al gobierno de Argentina a que tome acciones contra los ambientalistas que reanudaron sus protestas por la construcción de dos plantas de celulosas en la costa del río Uruguay. «Argentina debe asumir su responsabilidad de impedir estos bloqueos, que contrarían flagrantemente el derecho internacional y el derecho regional a la libre circulación de las personas y los bienes», enfatizó ayer en Santiago, Nin Novoa. Cientos de manifestantes participaron el fin de semana pasado de una caravana en la ciudad argentina de Gualeguaychú para repudiar la instalación de dos plantas de celulosa en Uruguay. Los integrantes de la denominada Asamblea Ambiental de Gualeguaychú habían decidido dejar de lado sus marchas y bloqueos a comienzos de mayo pasado, antes de que el gobierno argentino se presentara ante el Tribunal Internacional de La Haya para reclamar la suspensión de las obras de las plantas que se construyen en Uruguay. Los ecologistas argentinos apoyan también a activistas chilenos que se oponen a que la compañía Celulosa Arauco (Celco) instale una planta en el Valle de Itata. Durante el fin de semana tuvo amplia cobertura la salida del país de tres activistas extranjeros que habían participado en protestas contra Celco, luego de que el gobierno chileno advirtiera que serían expulsados. Al respecto, Nin Novoa dijo que había conversado sobre el tema con el ministro del Interior chileno, Andrés Zaldivar, y el peligro que la acción de estos grupos se extienda, toda vez que ya anunciaron una protesta para la próxima cumbre del Mercosur. «Hay que darle la atención que se merece, ni mucha ni poca, y actuar según las circunstancias del momento», señaló. La instalación de sendas fábricas derivó en un conflicto diplomático entre ambos países miembros del Mercosur. Uruguay denunció al Tribunal de Controversias del bloque la situación generada por los cortes de los puentes internacionales sobre el río Uruguay, que mantuvieron aislado a Uruguay por 45 días en plena temporada turística, causando pérdidas de hasta 400 millones de dólares. «No estamos dispuestos a afrontar nuevamente esta situación. Espero que prime la cordura y que de una vez por todas se comprenda que el caso deberá ser dirimido en la justicia», señaló el vicepresidente. Por su parte, el Gobierno argentino pidió a los manifestantes de su país que esperen en calma una solución política o diplomática al litigio con Uruguay. Nin Novoa, quien ayer se entrevistó ayer con la Presidenta Michelle Bachelet y otras autoridades chilenas, indicó que la posición de Uruguay en La Haya es muy clara y firme, porque, al contrario de lo que sostiene Argentina, el Tratado del río Uruguay, suscrito entre ambos países en 1975, no ha sido violado por Montevideo. «Su Capítulo Séptimo establece que las consultas entre países se harán para aquellos casos de obras que afecten la navegabilidad del río o que modifiquen el curso de las aguas. Y, en este sentido, las plantas de celulosas no afectan ni lo uno ni lo otro», enfatizó el vicepresidente. Respecto al impacto ambiental, Nin Novoa fue enfático. «Estas plantas están en un 5% por encima de seguridades ambientales respecto a las del Primer Mundo. Uruguay cumple con todas las normas internacionales de seguridad». Analistas han señalado que el gran perdedor en este contencioso es el Mercosur, ya que los mecanismos de resolución de conflictos no han funcionado. A ese respecto, el vicepresidente uruguayo reconoció que el Tribunal de Controversias del Mercosur ha trabajado con mucha lentitud e inconvenientes en la conformación de los jueces. «Eso ha ido horadando la marcha y el desarrollo de la integración regional», manifestó, aunque dijo que Uruguay seguirá en el bloque. Fuente: El Mercurio