En la COP29, las Partes acordaron extender por una década el Programa de Trabajo de Lima sobre género y cambio climático, destacando la importancia de incluir la perspectiva de género en todas las políticas climáticas. ONU Cambio Climático enfatiza que las mujeres, especialmente en comunidades vulnerables, sufren con mayor intensidad los efectos de eventos extremos y deben ser protagonistas en la acción climática.
Fuente: ONU Cambio Climático
En el marco del Día Internacional de la Mujer, ONU Cambio Climático alertó sobre el impacto desigual de los efectos extremos climáticos, señalando que las mujeres y niñas, especialmente en comunidades vulnerables, enfrentan mayores riesgos ante fenómenos extremos como sequías, inundaciones y crisis alimentarias.
En la reciente COP29, las Partes decidieron prorrogar por diez años el Programa de Trabajo de Lima sobre género y cambio climático, reafirmando la necesidad de integrar la perspectiva de género en todas las acciones climáticas para mejorar su eficacia y equidad.
El Secretario Ejecutivo de ONU Cambio Climático, Simon Stiell, destacó la relevancia de esta decisión: «Una acción climática más sólida aporta enormes beneficios a la vida cotidiana de las personas, como más empleo y oportunidades económicas, además de reducir los costos en salud pública. Aplicar un enfoque de género garantizará que esos beneficios se distribuyan de manera equitativa».
Diversos informes de ONU Cambio Climático subrayan las ventajas de considerar la equidad de género en políticas ambientales, incluyendo:
- Movilidad sustentable: Diseñar sistemas de transporte con perspectiva de género mejora el acceso equitativo a la movilidad sostenible.
- Adaptación y gestión de riesgos: Proyectos que contemplan las vulnerabilidades de distintos grupos poblacionales optimizan la financiación climática.
- Conocimientos ancestrales: Mujeres indígenas desempeñan un papel clave en la conservación de semillas y la previsión meteorológica, fortaleciendo la seguridad alimentaria.
- Transición justa: Políticas laborales inclusivas pueden reducir la brecha de género en la economía verde y azul.
En 2025, en el marco del Acuerdo de París, los países deberán presentar nuevos planes nacionales de acción climática (NDC 3.0), que deberán ser más ambiciosos que los actuales. Asimismo, se elaborarán estrategias de adaptación que permitan avanzar en una transición justa y equitativa.
Como parte de este proceso, ONU Cambio Climático ha desarrollado herramientas y recursos para ayudar a los responsables de políticas a integrar la perspectiva de género en las acciones de mitigación, adaptación y gestión de pérdidas y daños.
Hacia una nueva hoja de ruta de género y clima
En la COP29, las Partes también acordaron desarrollar un nuevo Plan de Acción de Género, que será adoptado en la COP30.
Este plan establecerá medidas concretas para garantizar que las acciones climáticas beneficien a mujeres y niñas en todo el mundo, promoviendo la igualdad de género como un derecho humano fundamental y un pilar de sociedades sostenibles.
Las Partes y organizaciones observadoras pueden contribuir a la elaboración de este plan a través de una convocatoria de propuestas, abierta hasta el 31 de marzo.