Las actividades forestales a lo largo de la cadena productiva generan más de 66.000 puestos de trabajo, que generan una renta anual superior a los mil millones de reales. Además, este sector representa aproximadamente el 50% de todas las exportaciones de productos agrícolas. «En los últimos años, la industria forestal ha aportado R$ 4,46 mil millones al Estado y otros R$ 3,42 mil millones serán invertidos en los próximos años», según datos de Cedagro.
Fuente: Mais Floresta
BRASIL (12/11/2022).- Los datos estadísticos con base en el año 2021 fueron presentados por CEDAGRO (Centro de Desarrollo de Agronegocios de Espíritu Santo) en Vitória, exponiendo que el sector de base forestal del estado brasileño incluye una amplia gama de actividades desde la producción hasta el consumo de madera por varios segmentos, como la industria de la celulosa, la industria del papel reconstruido, la industria del mueble, las unidades de aserrío para la producción de madera aserrada, incluyendo a la industria siderúrgica, agricultura, acopio y almacenamiento de carga, construcción civil, residencias y comercio.
Las actividades forestales a lo largo de la cadena productiva generan más de 66.000 puestos de trabajo, que generan una renta anual superior a los mil millones de reales.
El PIB del sector forestal corresponde al 7,89% del PIB de Espíritu Santo y cerca del 26,3% del PIB agroindustrial. Además, este sector representa aproximadamente el 50% de todas las exportaciones de productos agrícolas. Los impuestos generados anualmente suman cerca de R$ 1,2 mil millones, lo que corresponde a aproximadamente el 7% del total recaudado por el Estado en 2021.
En los últimos años, la industria forestal ha aportado R$ 4,46 mil millones al Estado y otros R$ 3,42 mil millones serán invertidos en los próximos años, según datos de Cedagro.

La tecnología es al mismo tiempo un aspecto del desempeño del sector. Un ejemplo es la productividad del eucalipto, que a través del mejoramiento genético ha alcanzado índices de referencia a nivel mundial. En Espíritu Santo, la productividad media es de 30,09 m³/ha/año, alcanzando más de 46 m³/ha/año
Los bosques ocupan 280.026 hectáreas, equivalentes al 6,07% de la superficie del estado. Cabe destacar que el área agrícola degradada asciende a 367.254 hectáreas, “lo que nos brinda un área apta para la siembra de eucaliptos y que nos permite aumentar el área sembrada, ya que hoy tenemos un déficit de madera de 159.000 hectáreas para los distintos segmentos. Algunos segmentos, como la producción de celulosa, acero y MDF, tienen reservas, mientras que los otros segmentos incluso están reduciendo sus actividades en el estado a raíz de esto”, destaca Gilmar Dadalto, presidente de Cedagro
Actualmente, la superficie estatal ocupada por eucalipto (264.298 ha) y pino (1.823 ha) es insuficiente para un sector que demanda 13.363.906 m³ de madera al año. Según Dadalto, “se necesitarían otras 425.602 hectáreas de plantaciones, 417.675 ha de eucalipto y 7.927 ha de pino”.
Por eso Cedagro lanzó la propuesta de elaboración del Plan de Desarrollo Forestal de Espíritu Santo para estar preparados para dar nuevos rumbos al desarrollo de la cadena productiva de los bosques cultivados en el Estado. Esta propuesta contó con el apoyo de todas las entidades presentes en el evento, Ministerio de Agricultura, Secretaría de Estado de Agricultura, Federación de Agricultura de Espíritu Santo, Unión de Ingenieros Agrónomos, IBÁ – Industria Brasileña de Árboles y Suzano.

Celulosa y papel, en alza
La producción de papel y celulosa acumula alza del 16,7% en 2022. De enero a septiembre de este año, el segmento fue responsable del mejor desempeño entre las industrias de transformación y otros sectores industriales de Espíritu Santo.
En el mismo período, la industria general tuvo retracción del 4,9% en el Estado y del 1,1% en Brasil, según datos del Productor Industrial Regional (PIM-PF), divulgados el martes (8) de noviembre del corriente año, por el IBGE y compilados por la Observatorio de la Industria de la Federación de Industrias de Espíritu Santo (Findes).
La economista jefe de Findes y gerente ejecutiva del Observatório da Indústria, Marília Silva, observa que ni siquiera la parada de una línea de producción en la fábrica de Suzano, en el estado, prevista para el final del tercer trimestre y el comienzo del cuarto, repercutió significativamente en el aumento de la producción de celulosa y papel.
Los demás sectores de la industria manufacturera, por su parte, tuvieron resultados negativos. Los productos alimenticios registraron una caída del 0,8% en los primeros nueve meses de 2022, la metalurgia se retrajo el 1,2% y los productos minerales no metálicos -7,2% en el mismo período. La industria extractiva, por su parte, registró una caída de 17% en el año.
Para el presidente de Findes, Cris Samorini, los resultados demuestran el desafío y también las oportunidades que el Estado y el país tienen por delante. “La caída de la industria extractiva, impulsada principalmente por el segmento de petróleo y gas, indica que necesitamos diversificar cada vez más nuestra economía e industrializar Espíritu Santo y Brasil para generar mayor valor agregado para los negocios. Estructurar una política industrial sólida es fundamental para crecer y generar más empleos e ingresos para la población”.
Cris considera que Findes ha actuado con fuerza para fortalecer las industrias y asegurar que sean competitivas en el mercado nacional y mundial, ya sea a través de acciones encaminadas a mejorar el entorno empresarial, para estimular inversiones en infraestructura e innovación o con la calificación de la mano de obra.
“Pero podemos impulsar el crecimiento de nuestro sector si más actores ven a la industria como un motor de desarrollo y trazan estrategias conjuntas para reindustrializar el país”, concluyó.





