Más de 50 comunidades de toda la provincia se unen en un reclamo por de derechos incumplidos. Un grupo de familias se instalaron en la Plaza 9 de Julio de Posadas para exigir respuestas al gobierno de Misiones. Denuncian abandono, promesas incumplidas y falta de políticas públicas para garantizar acceso al agua, salud, educación y territorios.
Fuente: EMIPA
MISIONES (18/9/2025).- Desde el lunes, representantes de más de 50 comunidades Mbya Guaraní de distintas localidades de Misiones acampan frente a la Casa de Gobierno en la Plaza 9 de Julio, en el centro de la capital provincial.
La medida de fuerza busca visibilizar la situación de vulnerabilidad que enfrentan y el reclamo por acciones de asistencia necesaria desde los organismos públicos competentes para el cumplimiento de la Ley Nacional 26.160 de Emergencia Indígena por derechos a las tierras comunitarias y el cumplimiento de derechos básicos que -según denuncian- llevan postergados en los últimos años vinculados al acceso al agua, la educación y la salud.
Los representantes de la Nación Guaraní remarcaron que la protesta surge “tras años de indiferencia ante un sinfín de necesidades”, y que los puntos principales del reclamo incluyen: el reconocimiento y regularización de territorios, el freno a los desmontes, la incorporación de los derechos indígenas en la Constitución Provincial, acceso a agua potable y energía eléctrica en todas las comunidades, caminos y viviendas dignas, además del derecho a la salud y a la educación intercultural.

“Estamos desde el lunes por tiempo indefinido frente a la Casa de Gobierno. No es una decisión apresurada, sino el resultado de promesas incumplidas y de la falta de respuesta. El Estado debe escucharnos y ocuparse”, sostuvo Hilario Moreira, mburuvicha de Tekoa Tape Mirĩ (Garuhapé), uno de los referentes de la protesta.
El dirigente explicó que entre los conflictos urgentes figuran el caso de Mbokajaty, en San Ignacio, y El Pocito, en Capioví, donde existen disputas territoriales que afectan la seguridad juridica y los derechos de las comunidades, productores y propietarios.
“Antes de llegar a esta instancia, realizamos asambleas e invitamos a las autoridades de Asuntos Guaraníes a escucharnos, pero no hubo respuestas. También presentamos notas formales y denuncias en distintas dependencias, sin resultados”, recordó.
Durante la jornada de protesta, se acercaron algunos funcionarios para intentar “poner paños fríos” a la situación, según relataron los voceros de las comunidades. Sin embargo, remarcaron que no abandonarán la sentada hasta mantener una reunión directa con el gobernador de Misiones.
“La voz Mbya sigue de pie, recordando que el Estado aún está en deuda y que no da respuesta al grito indígena”, señalaron desde la Entidad Misionera de Pueblos Indígenas (EMIPA), que acompaña el reclamo.
Con firmeza y organización, los pueblos Mbya decidieron permanecer en el corazón de Posadas, convencidos de que solo la resistencia colectiva logrará abrir un canal de diálogo real con el gobierno provincial.



