Últimas noticias

Opinión

“Nos han cambiado la perspectiva de la información”

Las palabras de Dimitris Tsitsiragos, Director General Manufacturing de la Corporación Financiera Internacional (CFI),

Funcionarios del CFI – Banco Mundial estuvieron en Gualeguaychú con vecinos y autoridades municipales. Palabra a palabra (traducción mediante), los representantes de la Corporación Financiera Internacional dejaron sentado ayer que algunas de las principales causas por las que Gualeguaychú se opone a la instalación de las plantas papeleras no son obstáculos para ellos. Concretamente, el empleo del método kraft y de la tecnología libre de cloros elementales.

Fuente: ICI. Servicio de prensa forestal de Uruguay

ENTRE RIOS (31/8/2005).- Terminaron mejor pero empezaron mal. Palabra a palabra (traducción mediante), los representantes de la Corporación Financiera Internacional dejaron sentado ayer que algunas de las principales causas por las que Gualeguaychú se opone a la instalación de las plantas papeleras no son obstáculos para ellos. Concretamente, el empleo del método kraft y de la tecnología libre de cloros elementales. Pero Gualeguaychú presentó batalla, junto a representantes del gobierno provincial. Y los funcionarios del dinero reconocieron que no habían barajado todas las cartas. “Nos han cambiado la perspectiva de la información que nos habían dado las empresas. Nos llevamos datos que desconocíamos”. Las palabras en boca de Dimitris Tsitsiragos, Director General Manufacturing de la Corporación Financiera Internacional (CFI), entidad integrante del Banco Mundial, resultaron ayer toda una definición. Dirigidas a los vecinos de la Asamblea Ambiental de Gualeguaychú, llegaron después de 6 horas de una reunión de trabajo predominantemente informativa pero con tramos de clara tensión entre unos y otros. “Vengo a decirles enfáticamente que el CFI como parte del grupo Banco Mundial no va a financiar ningún proyecto que no sea ambientalmente responsable”, dijo anteriormente, al abrir la reunión. “Venimos a dialogar con ustedes y escuchar sus planteos, que serán tenidos en cuenta” La presencia de Tsitsiragos marca un nuevo capítulo en la lucha de la comunidad del sur entrerriano contra la instalación de dos fábricas de pasta celulósica que ya se están instalando en Fray Bentos (ROU), frente a las costras entrerrianas. Luego de la solicitud argentina al CFI presentada dos meses atrás en Washington por el embajador José Octavio Bordón, de que la Corporación no financie los proyectos de Ence y Botnia por las graves amenazas al medio ambiente que ambos encierran, la entidad encargó a la consultora Pacific Consultants Internacional un estudio de impactos ambientales y económicos Pero el consultor encargado, Guillermo Madariaga, contactado por los vecinos de Gualeguaychú, no sólo se negó a concurrir a esta ciudad sino que también había manifestado que no entrarían en su análisis los impactos transfronterizos y se le atribuyeron en la prensa uruguaya declaraciones sosteniendo que las plantas no serían contaminantes. Esto mereció que una semana atrás, el canciller Rafael Bielsa anunciara que se plantearía un reclamo a la entidad por la imprudencia manifiesta y porque el estudio de impacto ambiental demandará un año de realización por lo menos, con lo que las palabras de Madariaga significarían unDesde el CFI, se convocó a los vecinos a reunirse con sus representantes en Montevideo o incluso en Washington. La respuesta fue una negativa rotunda: “deben venir ustedes acá, ver y escuchar”, les dijeron, lo que finalmente la Corporación cumplió ayer. Acompañaron a Tsitsiragos la Senior Environmental Specialist Isabelle París, especialista ambiental; otros tres funcionarios y el propio Madariaga.Los vecinos y representantes del gobierno entrerriano y municipal les informaron sobre los impactos que tendrían las fábricas sobre el“Como reconocemos que existen impactos transfronterizos, encargamos estudios de impactos acumulativos, no sólo en argentina sino también en el Uruguay”, dijeron los delegados de la Corporación. “El CFI no financia proyectos que tengan una tecnología contaminante o anticuada – sostuvo Isabelle París -. Los proyectos deben tener la tecnología más avanzada”. A ello le opuso el titular de Medio Ambiente de la provincia de Entre Ríos, Gabriel Moguilner, que se conoce ya que ambas plantas utilizarán la tecnología llamada kraft o al sulfato, empleada en el 80% de las plantas del mundo. “Si ustedes saben que esta tecnología es anticuada y contaminante, cómo van a financiar tecnología inadecuada de acuerdo a sus propias palabras”. Se le respondió que hay quienes no consideran que el kraft o el empleo de cloros elementales contamine. “Informes del Inti señalan al proceso kraft como uno de los más contaminantes de la industria del papel y la pasta celulósica en el mundo – respondió Moguilner -. Además, la resolución 9661 del Consejo de la UE no admite en absoluto el cloro elemental, que está condenado por haber causado los mayores problemas de contaminación, especialmente en afluentes líquidos. Y el documento que cuestiona el método kraft es del Banco Mundial”. Los vecinos plantearon como caso testigo en materia de impactos negativos para el sector turístico, el del Balneario Ñandubaysal sobre el Río Uruguay, ubicado a 6 mil metros de donde pretenden instalarse las dos fábricas. Recibe 165 mil turistas por temporada, posee una reserva ornitológica de 350 has y otra de bosque nativo en galería de 800 has, y se vería sumamente perjudicado. Se habló también del carnaval local, industria que recibe 447 mil turistas por edición, y otras actividades que sufrirían un grave perjuicio si se instalaran las pasteras, terminando incluso algunas de ellas. Esto generaría, dijeron los vecinos a Tsitsiragos, acciones judiciales por reclamos de los daños y perjuicios que afectarían no sólo a este sector de la economía local. Por otro lado, se informó que la lluvia ácida que producirían las plantas llegaría a un radio de hasta 100 km a la redonda, abarcando 1,5 millones de hectáreas. La ganadería (450 mil bovinos y 26 mil ovinos, entre otros), la agricultura (85 mil has sembradas de cereales y 143 mil de soja, girasol y lino), la lechería (360 tambos), apicultura (750 productores con 250 colmenas cada uno), cunicultura (producción y faenamiento) y la pesca y sus subproductos, resultarían dañadas. “No conocíamos bien a Gualeguaychú – reconocieron finalmente los funcionarios del CFI -. Mientras Botnia afirma que sólo tres días al año los vientos podrían traer malos olores hacia esta zona, ustedes me dicen que el viento Sudeste sopla hacia aquí 200 días anuales, lo que significa una gran diferencia que debemos documentar”. Tsitsiragos ofreció al intendente municipal Daniel Irigoyen el asesoramiento de Guillermo Madariaga como colaborador en el estudio de impactos que están realizando los vecinos, e informó que se conformarán desde el CFI cinco comisiones de estudio para evaluar las consecuencias de las plantas en relación con la pesca, la calidad del agua, del aire, la agricultura y ganadería, y el turismo de Gualeguaychú. Estudio de impacto ambiental propio Los vecinos de Gualeguaychú están realizando su propio estudio de impactos ambientales, económicos y sociales en la zona, encarado con recursos propios. Apelan a la analogía, esto es, a observar lo sucedido en torno a plantas de pasta celulósica en otras regiones del planeta y las consecuencias producidas, en circunstancias similares a las de Gualeguaychú, para luego trasladar lo analizado a nuestra región, cuantificando económicamente dichos impactos. Todos los sectores productivos se verían potencialmente afectados, expresaron, pero la pérdida de valor inmobiliario rural y urbano en la región superaría por sí sola el monto total de las inversiones anunciadas para el Uruguay. Este estudio servirá como fundamento a las múltiples demandas económicas que afectarán a quienes propician y participan en estos proyectos de inversión. Por la Asamblea Ambiental, presentaron ayer los informes Sebastián Bel (Comisión de Informe Turístico), Guillermo Luciano (Comisión de Impacto Económico), Osvaldo Moussou y Juan Veronesi (Comisión de Agricultura), Fabián Moreno Navarro (Comisión de Acciones Legales) Alberto Farfán Mealla (Comisión de Salud). Tomaron también la palabra María de los Ángeles Figún, Horacio Melo, Héctor Rubio; habló sobre el Ñandubaysal su propietario Sánchez Álzaga, y varios vecinos más plantearon realizaron intervenciones y plantearon dudas a los funcionarios del CFI. Por el gobierno municipal estuvieron el intendente Daniel Irigoyen, el Secretario de Cultura Javier Vilanueva, el de OOPP Enrique Martinelli, además de Bel. Por el gobierno entrerriano estuvieron presentes el vicegobernador Guillermo Guastavino, el diputado Juan José Bahillo y el Director de Medio Ambiente Gabriel Moguilner, éste último, con acertadas intervenciones en defensa de los derechos argentinos. Los delegados de la Corporación Financiera Internacional (CFI) fueron, además de Tsitsiragos y Paris, Yolande Duken (Resident Representative Argentina, Uruguay, Paraguay y Chile), Mark Constantine (Principal Strategy Office) y Sharmila Hardi (Principal Investment Office). Guillermo Madariaga es consultor asociado en la región América Central de Pacific Consultants Internacional (PCI Americas). Negativa a firmar el acta Los representantes del CFI se negaron terminantemente a firmar el acta de la reunión de ayer. “Aparecen allí acusaciones al gobierno uruguayo y se afirma que las plantas contaminan, cosas que tenemos aún que documentar si son así – dijo Tsitsiragos -. Sólo firmaremos que hemos recibido una carta de ustedes”. Se les extendió entonces un papel aparte, con un escueto “recibido” que debía llevar la firma del griego. Nuevamente se negó. “Les mandaré mañana una carta de recibo desde mi oficina”, concluyó. «Que no salga en los diarios» “Que no salga en los diarios – dijo Tsitsiragos en un momento, refiriéndose exclusivamente a una pregunta que se había hecho -. Ustedes saben que a los diarios no les importa esto, sólo les importan los titulares”. Semejante afirmación mereció de inmediato la respuesta de esta periodista y del colega de diario El Argentino.“A los diarios y a los periodistas presentes les importa el bien común y la verdad, no los titulares”, afirmó El Día. “Oh…, no problem, no problem…”, zanjó Mark Constantine. “No problem, pero dejemos en claro – agregó El Día – que gracias a la difusión realizada por la prensa local y nacional es que, por ejemplo, están ustedes hoy aquí”. Fuente: Nuevo Diario EL DIA – Gualeguaychú – ARGENTINA – 31 agosto 2005

Fuente: ICI. Servicio de prensa forestal de Uruguay

Artículos relacionados